¡Existís!

 Hoy, volviendo de La Plata, tuve la revelación de que existís. Sí, existís. Hasta hace unos días me golpeaba la duda sobre tu existencia, pero hoy sentí que estás por ahí en alguna parte de este país. Lo pensaba mientras volvía de una Jornada de Capacitación... El día estaba soleado, los árboles, los niños, adultos y los ancianos caminaban algo lento por el lugar, yo en cambio, caminaba apresurada por esas hermosas diagonales que posee la ciudad, fue en ese momento cuando me crucé con tres chicos. Uno de ellos caminaba tímidamente con una carpeta grande en la mano, creo que no me vio hasta que casi nos chocamos y me dio el paso. Este hecho tan insignificante se sumó a otro en donde luego de caminar y llegar hasta la parada subí al colectivo. No había muchos asientos disponibles, pero logré divisar uno y mientras me sentaba vi al chico más lindo del día. Él dormía en su asiento, parecía cansado, esto me distrajo porque empecé a pensar. Primero imaginé que él salía de la Facultad, luego (quizás por el buzo y el cansancio en su rostro) pensé que podría ser un obrero, ahora pienso que quizás volvía de la casa de su novia... Sea cual sea el motivo ese sentimiento que tuve al verlos, esas ganas de conocerlos más, me hicieron imaginarte.
Sos.
Tenés apuntes en tus manos.
La realidad no te da miedo,
porque poseés la seguridad de que tus acciones
la pueden modificar.
Te gusta tomar mate igual que a mí.
Preferís el otoño,
te divertís mucho en el verano.
Sos, realmente, simple
quizás por eso aún no te he encontrado
y siempre tenés una pulsera azul en tu muñeca.
Estás. Existís. Respirás fuerte. Caminás seguro.
 Y el día en que mi inocencia te encuentre te mostraré este blog y todos los textos que escribo. Me explicarás porqué no nos habíamos encontrado antes y bailaremos, tomaremos, café.
Volveremos a esa ciudad.

NIÑA

Niña que miras por la ventana,
nadie te observa.
Niña, estás sola mirando el cielo nublado.
Él está lejos,
él se fue.

Niña que miras por la ventana,
quisiera decirte que te entiendo,
que algo mejor vendrá...
que hablarás con otros sobre Literatura y Cine
y ya nadie te dirá que no entiendes a Bajtín.

Niña, quisiera decirte que tu amor por México se esfumará,
y que otros te relataran cuentos...
Inventarás nuevas palabras sola.
Niña, quisiera decírtelo pero
yo soy esa niña,
que ahora mira por la ventana.
El cielo está tan nublado y nadie me observa.
él está lejos,
él se fue.
Después de mucho tiempo él se fue
y solo queda el miedo de volver a perder.

Agradezco no encontrar al amor de vida.

 Agradezco no encontrar al amor de vida.
Agradezco no encontrarlo en
 bares,
boliches,
reuniones.
Agradezco que no me quite
 tiempo,
ni espacio,
ni a mi corazón de cristal.
Agradezco lo bueno y lo malo que ese amor me pueda generar
en mí.
Lo quiero lejos, tal como está.

Amor

¿Existe algo en el mundo más importante que el Amor? Quizás sí o quizás no pero cuando lo obtenemos, cuando lo vivimos, es algo único. No hablo del amor de pareja, hablo del amor en términos generales. Cada relación humana conlleva, misteriosamente, grandes matices o escalas de amor. Una charla con una amiga, una salida al teatro con amigos o el mate de todas las tardes con la familias son claros reflejos del amor. Obviamente en esos pequeños momentos somos más conscientes de Dios, de todo su amor. La búsqueda constante de felicidad termina en las relaciones pacíficas de nuestra alma con el mundo y es ahí cuando tomamos conciencia de lo importante que es vivir. Quizás no tengas pequeños momentos como tomar un mate o salir a dar un paseo, pero créeme que hasta el movimiento de la una hoja de un árbol nos puede hacer felices.

No hay mucho que pensar

 Existen momentos "únicos" en la vida aunque, con la experiencia, una se da cuenta que "lo único" se puede repetir pero ya no de la misma forma. Entonces, nos podemos dar cuenta que lo que creíamos irreemplazable se torna común. Si entendés lo que quiero decir, sabrás que hablo de las palabras típicas que recibimos constantemente. Es entonces cuando una vacila, supone que "lo único" no existe ya que se repiten las mismas palabras, una y otra vez. Sí, una piensa en que lo que creíamos único (la repetición de esas palabras escuchadas y creídas como únicas) muchas veces, concluiremos en que no son más que nuestras propias proyecciones y miles de vacíos que intentamos rellenar, pero NO, esa sensación de "lo único" existe y los espejismos también. Ríe, ríe frente a los espejismos. Yo, por lo menos lo hago. También, a veces, me gusta utilizar frases típicas o gestos que todas usan. Sé muy bien ante quién usarlos. Hay que extirpar el abismo de las tristezas. Hay que dejar de pensar "¿Qué hay que hacer ante una persona que actúa y utiliza palabras que antes otro ser humano ya había utilizado?"

Las metas

Tu meta es presentar impresentables en las fiestas familiares. Tu meta es salir con putas y creerte un actor porno. Todo eso es tan lejano a mi concepción humilde de amor. Lo siento cariño, te abrigaré en esta tarde invernal: te pondré una bufanda de sueños, que yo sola tejí, y una campera de nubes que la tomé del aire. Te prestaré medias, que no te entrarán y te calzaré polainas de colores. Te besaré la frente y cerraré la puerta. Cerraré la puerta (mil veces abierta, mil veces cerrada) y trataré de rezar para que en tu vida te vaya hermoso. Detrás de la entrada mi lágrima caerá y mi corazón loco deseará verte por el picaporte, pero no lo haré. En su lugar, imaginaré que el viento no te hará daño y que el sol tampoco lo hará. Así pasaré unos días. Hasta que una mañana soleada saldré y ya no estará tu recuerdo. Quizás, otra persona haré pasar. Lo sé de memoria porque siempre pasa.
Cada día es más fácil abrigar a una persona, abrigarla de verdad. Me tocará sonreír y olvidar hasta que esto desaparezca. Quizás habré perdido o habré ganado. Quizás nadie me hable sobre el piano, como vos lo hacías. Quizás nadie me hable de la historia de la música.

Descubrimiento

Hace varios días que no publicaba una entrada nueva para este blog, pero hoy, estoy acá, escribiendo nuevamente para contarle al aire que en estos días me crucé con algo parecido al AMOR. Sí, estuve de novia y me perdí en cada cosa poética que veía en él... Pero pronto me di cuenta que en realidad yo SOY POESÍA y que a mi amor lo deposité en alguien cuando en realidad lo tenía que depositar en mí. En fin, atrás quedaron mis días y mi rol de novia. Atrás quedaron los ecos de mi corazón al romperse. Hoy soy Poesía y así veré al mundo. Es simple: sé lo que soy.